Cada que se cumple un año más, el ciclo de la vida completa un circuito que esta determinado por los 365 días que lo comprenden, por eso es denominado como un nuevo comienzo y la energía del mundo individual cierra el círculo de experiencia en el día que precede esa fecha especial. El día del cumpleaños, los astros vuelven a estar como el día del nacimiento, por eso se dice que es como un «renacer a la vida» o como «un nuevo amanecer». En el plano espiritual, “cumplir años” sería como dar una vuelta más en una espiral ascendente, puede parecer un círculo plano que se repite; pero si se considera la dimensión transpersonal, ese círculo es en verdad como un resorte, crecido desde el suelo hacia el cielo.
Cada año es una vuelta, pero también puede serlo cada estación, cada mes, cada día, cada hora. En cada vuelta puede haber un poco más de lucidez, de libertad o de madurez. Por ello se han creado algunas recomendaciones espirituales para este día especial:
- Vestir de blanco para recibir la energía de este nuevo ciclo.
- Hacer una oración especial con velas y flores blancas, además con incienso para llenar de luz este nuevo camino o esta nueva etapa de la vida.
- Festejar con pastel redondo que representa un Mándala de colores.
- Pedir a amigos y conocidos que cada felicitación esté llena de luz y amor, es decir que se haga con conciencia plena; las palabras y los deseos son energía que llenarán de luz éste nuevo ciclo.
- Escribir un resumen de los logros personales y hacer un plan para el nuevo año que comienza, en cuanto a crecimiento interno.
- Agradecer por todo lo recibido de ese año que termina, como un gran ciclo de aprendizaje y crecimiento.
- Decretar y visualizar los deseos personales y para el mundo, pues este día la luz que llega a la vida de quien cumple años tiene una magia especial.
Cada cumpleaños representa una oportunidad, por eso hay que celebrarlo, disfrutar los logros y continuar tu vida en armonía y abundancia.
